mauro.ar*

Mejora tu Productividad con la Regla del 85%

Muchos, me incluyo, nos la pasamos puliendo nuestro laburo hasta el cansancio buscando la perfección. Obvio, hacer las cosas bien es fundamental, nos diferencia de los que hacen las cosas por hacerla así nomás.

Pero ojo, todo en exceso es malo. Después de darle vueltas y vueltas, llega un punto en que ya no avanzamos.

Seguro, otra vuelta de tuerca podría mejorar un poquito el resultado, pero esos cambios son tan chiquitos que solo los notamos nosotros.

La mejora no justifica el tiempo invertido.

Cuando caemos en esta trampa, nos quedamos paralizados en un círculo vicioso que llamamos perfeccionismo. Nos da miedo soltar nuestro trabajo al mundo, pensando que no está listo, que necesita más pulido.

Ojo, NUESTRO TRABAJO NUNCA VA A SER PERFECTO. Siempre va a haber algo más que podríamos haber hecho para mejorarlo un poquito más.

Una forma de encarar este problema es lo que muchos llaman la regla del 85% 1.

Revisa y mejorar tus tareas hasta que lleguen al 85% de la calidad que buscas.

Cualquier tarea que hagamos, ya sea escribir un artículo, pintar un cuadro, cocinar un plato de comida o lo que sea que hagamos, cuando llegue al 85% de un estándar de alta calidad ya podemos considerarlo de primera.

Pero si sos un poco obsesivo como yo, y pensás que todavía se puede mejorar, podés darle una vuelta más de tuerca, aplicando la regla del 85% una vez más.

Solo una vez más. No más que eso.

Por ejemplo, después de escribir el borrador de cualquier post, newsletter o libro, podés seguir revisando tu trabajo para corregir los errores obvios, reestructurar frases y párrafos para que tengan más sentido y hacer que todo el artículo se lea bien.

Luego, una vez que terminas de editar y pulir la pieza, hacés una revisión gramatical para encontrar y corregir errores ortográficos que podrías haber pasado por alto. Podés incluso hacer que algunas ideas sean más claras y hacer que la escritura sea más compacta y legible.

A estas alturas, tu trabajo ya está al 85% del estándar propuesto.

Pero, como dijimos, todavía podés hacer una revisión final: otra vuelta para mejorar la calidad de tu trabajo para llegar al 85% del estado ideal: revisar todo el texto para encontrar frases que podrían refinarse aún más, corregir signos de puntuación, errores tipográficos, etc.

Y eso es, ya tenés un producto que se aproxima bastante a lo que pretendés, un trabajo de calidad, o por lo menos que llega al 85% de la calidad deseada

Lleva un poco de tiempo y práctica, pero si aplicás esta regla en tus trabajos, vas impresionar a todos con un excelente producto final.


Notas

  1. Artículo de El Economista que brinda una idea de cómo funciona la regla del 85 para ser más productivo en tu trabajo. Así funciona la regla del 85%

#productivity